En nuestra edición de setiembre queremos destacar un avance importante en materia de protección de los derechos de las personas mayores en la región. Se trata de la media sanción en Paraguay del proyecto de ley de aprobación de la Convención sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores. Esto significa que si se obtiene la aprobación de la Cámara de Diputados, Paraguay podrá sumarse al listado de países que han aprobado la Convención. Esto es un paso relevante en tanto constituye un marco para las políticas en materia de protección de derechos de las personas mayores.
Esta noticia surge en el marco de un nuevo Día Internacional de las Personas Mayores, que en este año se conmemora bajo la consigna "Las personas de edad impulsan la acción local y mundial: nuestras aspiraciones, nuestro bienestar y nuestros derechos" en un esfuerzo por el reconocimiento de su aporte a las sociedades y su papel trascendental en la promoción y protección de los derechos. Así, las personas mayores de la región se han embanderado y vienen impulsando el reconocimiento a la Convención Interamericana que promueve sus derechos, realizan actividades de visibilización de este colectivo, de las vulneraciones a sus derechos a los que están expuestas, a la vez que promueven la problematización e identificación de los estereotipos negativos hacia la vejez. A esta labor se han sumado la academia, diferentes agrupaciones y organizaciones y de a poco se continúa avanzando.
Queda claro que es necesario que los colectivos posicionen y traccionen la defensa sus derechos frente a los Estados. También es claro que cuanto más voluntades se suman, más fuerte se alza su voz y es más difícil que no sean escuchadas. Es así entonces, que parece claro que las personas mayores necesitan de otras voces y más apoyos para seguir avanzando en la promoción y protección de sus derechos.
Es necesario que las sociedades se comprometan en su conjunto por la protección de los derechos de todas y todos y que sea una lucha de todas y todos, sólo así, nadie quedará atrás.
Coordinadora RLG