Adolfo Rodríguez Herrera / Jacqueline Castillo
CEPAL – Serie Financiamiento del Desarrollo núm.239. Septiembre 2011.
Resumen:
Este trabajo tiene dos objetivos complementarios. Por una parte, evaluar a partir de las últimas encuestas de hogares cómo ha evolucionado el uso de los servicios de salud por parte de los diferentes grupos de ingreso. Con esto se pretende indagar hasta qué punto se ha revertido la tendencia hacia la segmentación del sistema público de salud, lo cual fue uno de los objetivos de la reforma de la atención primaria implementada en los años noventa. Por otra parte, realizar una proyección del uso de los servicios de salud en los próximos 40 años, con el fin de alertar sobre las consecuencias que la transición demográfica puede tener sobre la viabilidad financiera del modelo de salud costarricense. Las conclusiones relacionadas con el primer objetivo del trabajo son relativamente positivas. A pesar de que a lo largo del periodo bajo estudio hubo un aumento en la participación de proveedores privados en los servicios de consulta médica y de hospitalización, durante ese periodo no se perciben tendencias a la segmentación del sistema público de salud. Por el contrario, durante ese periodo, que corresponde con la implementación de la reforma, se evidencia un aumento en el uso de los servicios públicos de consulta médica por parte de todos los grupos de ingreso, mientras que en materia de egresos hospitalarios no se muestra una reducción sustantiva en la importancia relativa del proveedor público. Por el contrario, las conclusiones relacionadas con el otro objetivo de la investigación resultan bastante alarmantes. En el curso de los próximos 40 años Costa Rica completará su transición demográfica. Si en el mejor de los casos se mantienen los actuales patrones de uso de servicios de salud por grupo de edad, el envejecimiento de la población provocará un aumento superior al 18% en la tasa de consulta médica, al 23% en la tasa de egresos hospitalarios y al 62% en las estancias hospitalarias. Ambos temas se encuentran estrechamente relacionados, porque la adhesión de todos los grupos de ingreso al sistema público de salud es indispensable para que puedan implementarse las estrategias necesarias para hacer frente a la transición demográfica sin que se deteriore sensiblemente la atención de salud. En la medida en que se deteriore el grado de integración social del sistema público y los grupos medios empiecen a buscar alternativas privadas para hacer frente a sus necesidades de atención en salud, habrá menos espacio político para tomar las medidas que requiere el sistema con el fin de salvaguardar su solvencia financiera.
Ver documento en siguiente enlace:
http://www.cepal.org/publicaciones/xml/7/44517/lcl-3348.pdf