Los gobiernos deberían adoptar pensiones de vejez y reforzar sus sistemas de protección social para cumplir con los derechos humanos de las personas mayores y sus familias.
Así lo indicó hoy la experta independiente de la ONU sobre derechos humanos y extrema pobreza, Magdalena Sepúlveda, con motivo de la celebración este 1º de octubre del “Día Internacional de las Personas Mayores”.
Sepúlveda subrayó que es hora de erradicar el mito de que las pensiones no están al alcance de los países pobres. Además, indicó, son la forma más simple de garantizar el derecho a la seguridad social de los mayores de 60 años y de impedir que caigan en la pobreza.
“Tan sólo hay que observar los logros de los 46 países de ingresos medios y bajos que cuentan con pensiones sociales. Las pensiones no sólo mejoran las condiciones de vida de las personas mayores, sino también las de sus familias. De esa forma se beneficia a la sociedad en su conjunto”, señaló
La experta explicó que, en promedio, cuatro personas adicionales se benefician de una pensión social, lo que a su vez contribuye al desarrollo económico de las comunidades pobres.
Las pensiones deben ser una prioridad para los Estados comprometidos con la lucha contra la pobreza y con el cumplimiento de los derechos humanos tanto de los jóvenes como de las personas mayores”, recalcó.
En 2050, se calcula que 2.000 millones de personas tendrán 60 años o más, la mayoría en países no industrializados.
Fuente: Centro de Noticias ONU. 30 de septiembre, 2009.
http://www.un.org/spanish/News/fullstorynews.asp?NewsID=16670